El jueves, el Ayuntamiento de Pamplona presentó la nueva campaña de Pamplona por el civismo y, por ello, ha colocado etiquetas en el mobiliario urbano -farolas, bancos, árboles, papeleras, señales..- con el precio que paga anualmente para mantenerlo. Personalmente, ayer paseando por la ciudad, ví el mobiliario ornamentado con las etiquetas y a mí, personalmente, me parece una campaña horrible. pues me dió la impresión -véase la foto- de que estamos en una subasta y que tenemos la ciudad de rebajas. Lamentable.
La campaña deberían llamarla Pamplona por el cinismo, pues gastarse 65 mil euros en elementos de mobiliario urbano de la ciudad con esas horribles etiquetas, que van a durar un fin de semana -si es que han llegado tras el jueves universitario de ayer- roza el delito. Mal camino llevamos en la carrera a ser elegidos la Capital Europea de la Cultura de 2016.
A los que hacemos The Green Lion Project, lo único que nos alegra de esta campaña es que no hay ninguna de esas horribles etiquetas en nuestras fuentes típicas pamplonesas, las de metal de color verde con el león como grifo y pulsador redondo. ¿Será porque los únicos que las arrancan de su ubicación son los del propio Ayuntamiento y las sustituyen por un mobiliario urbano nuevo y de diseño?
2 comentarios:
Ayer me disponía a destrozar una farola con un enorme pedrusco, cuando de repente... vi una de esas enormes etiquetas rosas, y dije... "¡Alto! ¡No! ¡No debo hacerlo! ¡ES UN ACTO MALVADO!"
...y desistí de mis intenciones.
Alabadas sean las etiquetas rosas!!!
Vale¡ acabamos de ver que el gasto de la campaña estaba justificado, hahahahaha alguien al ver el coste ha desistido de sus (malas) intenciones, hehehehe
Un saludo.
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